TINTA VERDE: Francisco Ucán Marín
Con el objetivo de recabar, analizar y presentar propuestas y recomendaciones para la definición de políticas públicas y programas que atienda el problema de la migración indígena, la primera semana de Diciembre se efectuó la Consulta Nacional sobre Migración de la población Indígena, en la que participaron los representantes de los diversos grupos étnicos asentados en Campeche.
El delegado de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas en el Estado, Víctor Uc Hernández, consideró que entre las causas fundamentales que generaron la migración de cientos de población destacan el cambio de modelo económico que implicó privilegiar una economía de mercado sobre la campesina.Uc Hernández dijo que otras de las causas son el desempleo y en consecuencia la falta de alternativas económicas; la excesiva parcelación y el deterioro de los recursos naturales; la caída en los precios de los principales productos agrícolas, como el café, henequén, azúcar, tabaco, cacao y tomate, además de una baja demanda de productos artesanales; los conflictos religiosos; los desastres naturales; los tiempos muertos del ciclo agrícola y la falta de servicios en las comunidades indígenas, especialmente en materia de salud, educación e infraestructura. Durante el panel de discusion el funcionario reconoció que la población indígena se ha incorporado cada vez con más fuerza en los flujos migratorios nacionales e internacionales, aún a costa de la violación de sus derechos humanos y laborales, lo cual también está provocando cambios en la configuración de las poblaciones de origen y complejos fenómenos de transculturización, tanto en los nuevos asentamientos indígenas en México, como en los Estados Unidos.
Agregó que en el caso de Campeche, prominentemente indígena, se registra un bajo índice de flujo migratorio, con 1.2 por ciento, contra el 4.3 por ciento de la media nacional, y generalmente el flujo de migración es hacia los polos de desarrollo de la península, haciendo un total de 20 mil indígenas en la ciudad de Campeche y Ciudad del Carmen. Por otra parte citó que la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas estima que en la actualidad de los 803 municipios indígenas que existen en el país, un 43 por ciento registra una intensa actividad migratoria y sólo el 13 por ciento son considerados como de fuerte atracción.
Entre los pueblos indígenas que registran mayores movimientos migratorios se encuentran los purépechas, los mayas, los zapotecos, los mixtecos de Guerrero, Oaxaca y Puebla; los mazatecos de Oaxaca; los otomíes de Hidalgo, Estado de México, Querétaro, Puebla y Veracruz, nahuas de Guerrero, Hidalgo, Estado de México, Veracruz y San Luis Potosí; los chinantecos de Oaxaca, kanjobales de Chiapas, totonacas de Veracruz, mazahuas del Estado de México, choles de Chiapas y mixes de Oaxaca. Se mencionó también que los migrantes indígenas mexicanos se han asentado en los campos agrícolas de estados del norte de la República con una fuerte economía agrícola empresarial, en alrededor de 105 ciudades de nuestro país.
En este proceso deben considerarse también las migraciones temporales de indígenas centroamericanos, pero en su mayoria guatemaltecos hacia fincas cafetaleras y ranchos ganaderos del Estado de Chiapas. En los últimos años la migración indígena no ha sido ajena a las grandes tendencias de la migración mexicana, de tal suerte que las mujeres se han integrado crecientemente a las corrientes migratorias, además de recibir la carga de las responsabilidades familiares en las comunidades de origen. Los estados del sur de Mexico ademas son paso natural dentro del proceso de migración estacional y permanente de indígenas centroamericanos, que como sus coterráneos utilizan el territorio nacional como zona de tránsito o de residencia en su intención de llegar a los Estados Unidos. Asociaciones en Estados Unidos dan prueba de esto como la asociación de Yucatecos en Estados Unidos.
Los asentamientos irregulares de los migrantes centroamericanos en su paso por Mexico les obliga por la necesidad de sobrevivir, usar leña como combustible y diversas especies como alimento. La eficiente ayuda de parte de las autoridades ayudaría a los migrantes y al ambiente en general. Sin embargo, mientras las necesidades de sobrevivir esten presentes, la conciencia sobre la importancia del ambiente queda totalmente en segundo plano. Además, la migración de indigenas Mayas Mexicanos a Estados Unidos, termina por aislar al individuo de su lugar natal y parcialmente de su cultura.
Estados de la Unión Americana en los que vive la mayoría de los Yucatecos:
Fuente: Secretaría de Relaciones Exteriores.
Sistematización y Recopilación de Información del Programa para las Comunidades Mexicanas en el Exterior. Agosto 2002.
* Los datos de esta columna estan basados en datos obtenidos por Magdalena Moreno Vazquez, quien cubrió la noticia los datos en la Consulta Nacional sobre Migración de la población Indígena .