Wednesday, October 04, 2006

Tuve la primera crisis existencial a los ocho años




Tuve la primera crisis existencial a los ocho años
Por Ramón Sepúlveda

Francisco Ucán-Marín, biólogo literato: Tuve la primera crisis existencial a los ocho años

Por Ramón Sepúlveda

Eco Latino continúa conversando con valores jóvenes de la literatura hispano canadiense en Ottawa, en esta oportunidad hablamos con Francisco Ucán-Marín, poeta joven que viene de México y que además de escribir poesía y narrativa, es también un biólogo que se dedica a la investigación y la ecología.
RS: Cuéntame un poco de tu trabajo en la ciencia, ¿en qué pie te hallas hoy?
FUM: Mi trabajo científico tiene dos áreas; una es la biología de la vida silvestre, y la otra es la determinación de la contaminación… en este caso de productos químicos que hemos producido por nuestras actividades humanas o por la industria y bueno esto causa cierto impacto en la salud en la vida silvestre. Mi trabajo está enfocado a entender como estos productos químicos están interactuando en las funciones normales de un animal. Trabajo específicamente con la glándula tiroides que es muy importante en mamíferos o pájaros porque regula la temperatura y el crecimiento. Es la fuente de hormonas para el balance del cuerpo.
RS: Y esto es aplicable ciertamente a los seres humanos...
FUM: Sí, el problema con la tiroides, junto con todo el sistema hormonal, es que no se sabe mucho de ella y por eso es que hay algunas investigaciones que ayudarían a entender los problemas en humanos o la población en general. Así es que, entendiendo estos procesos se puede enfrentar ciertas enfermedades. Por ejemplo Parkinson o Alzheimer que son muy conocidas y se tiene muchos datos de personas con la enfermedad pero no se sabe mucho de como esta enfermedad realmente se produce. Entonces para entender estos procesos se necesita de investigación y eso nos daría esperanzas de encontrar nuevas terapias y tratamientos que a futuro nos beneficien. En mi caso yo no soy médico, soy biólogo y mi investigación esta enfocada hacia la vida silvestre. Mi trabajo es en el polo norte, entonces yo viajo a Noruega cada año, y estoy trabajando en unas gaviotas del polo norte porque toda la contaminación que hacemos aquí en Canadá o en los países industriales termina en el polo norte. Se acumula porque no hay la luz que hay en el trópico, o cercano a la linea del Ecuador. El polo solo tiene luz por un tiempo y como muchos de estos productos son fotodegradables, se acumulan ahí porque no hay esta capacidad que los descomponga. Claro, en el ciclo alimenario… esto se acumula y llega al final de todo a los predadores, los carnívoros, de la cadena que en este caso son osos polares o pájaros del ártico que son los animals que al final de cuenta bio-acumulan todos estos compuestos. Mi trabajo es identificar que compuestos tienen, el por qué y como están afectados, y después entender de qué manera estos químicos van a afectar la reproducción a futuro o la inducción de cáncer y sus efectos. La idea o el beneficio a futuro es el avance en la medicina y por otro lado, presentar actas que nos ayuden a la regulación de estos compuestos en el mercado y así a futuro un beneficio al ambiente... Y proteger zonas de reservas, parques naturales y todas esas cosas.
RS: Para ti ¿qué viene primero, la biología o la poesía?
FUM: En mi caso yo quiero un balance en mi vida, y me gusta escribir. Me gusta mucho la idea de escribir ciencia para su divulgación hacia el público en general, y me agrada la idea de crear un estilo de poesía que haga pensar en las cosas que nos rodean y tomar en cuenta esas cosas cotidianas que nos abrazan día a día. Mucha gente cree que si estás haciendo un doctorado en física o química, eres una persona extraña de lentes y pelos parados y que escribes cosas que nadie más que tú mismo entiendes. Sin embargo, cuando transmites esa información en forma entendible, creas un público educado que se da cuenta de que no es tan complicado, pero que si hay mucha lógica y mucho trabajo detrás de esa gente de ciencia.
Así, la manera de transmitir estos conocimientos es una de mis principales metas, ya que la educación ambiental, o mejor dicho la educación para entender datos ambientales es una herramienta poderosa, eso nos ayudara a futuro a tomar decisiones correctas en cuanto al beneficio de todos en su momento.
Aunque debes saber, Ramón que yo amo el arte y la literatura desde niño, desde antes de saber que sería biólogo. A esa temprana edad tuve una crisis existencial…
RS: ¿A la edad de cinco años?
FUM : No, (risas)..., a la edad de ocho, de hecho yo estaba en el dilema de ser o biólogo o arqueólogo. Tú sabes, yo vengo de una familia indígena maya así que desde niño tuve contacto con animales y con una cultura increíblemente rica y antigua. Así que no me fue difícil estar dentro del arte y de la naturaleza en la selva maya de México.
Pero la base de lo que soy hoy, es que desde pequeño me ha gustado saber como funcionan las cosas y las explicaciones lógicas de lo que pasa, y te repito, al venir de una cultura tan vasta como la antigua maya, las creencias y ritos cotidianos fueron mis primeras observaciones de lo que es la ciencia. Creo que toda esa habilidad de mi madre y mi padre por alimentarme con libros me hizo evolucionar mucho hacia la ciencia…
De mi lado de arte tú sabes México es un país que te absorbe y te inspira muchisimo con sus serenatas, estudiantinas, rondas, boleros toda esa exagerada y acelerada emoción de vivir una vida bohemia… me fascina la poesía… leer y escribir poesía… me encanta… así que en ese balance de arte y ciencia… siento que voy avanzando en la búsqueda del balance que quiero.
RS: El objetivo final no es solo escribir poesía, sino escribir poesía que haga pensar y que nutra en aspectos ecológicos y del medio ambiente, ¿no? Y por otro lado hacer entendible esos complicados manuales científicos.
En Cuanto a tu poesía, en tu vena romántica, boleros, etc.… ¿Qué es lo que te anima a escribir? Se que es una pregunta amplia, pero es el amor de una mujer, el color del cielo ¿Como poeta que te inspira?
FUM: Bueno, esa es una pregunta bastante amplia... porque hay días en que queremos hablar de lo bello que es un árbol, y otros en que no notamos que el árbol esta ahí. Me recuerda a Jaime Sabines que dice que cuando tienes ganas de llorar, hasta la palabra “baño” te hace llorar. A mi me gusta mucho exaltar las emociones en mis poemas y generar sentimientos alrededor de un poema tomando como eje las emociones, aunque a mi también me afectan mucho los sueños, viniendo de una familia maya, le damos mucha importancia a los sueños. No creo los sueños literalmente, pero influyen mucho en lo que hago. En los sueños generalmente afloran muchas emociones que tenemos escondidas, y al final es una válvula de escape de emociones que a veces no arreglamos conscientemente, porque todos los poetas escribimos como manera de expresar emociones que de otra forma no sabemos como expresar. En si, todos los artistas usan el arte como una extensión para complementarse así mismos en su búsqueda de compartir lo que son.
Yo escribo en diferentes espectros, desde poemas para niños hasta poemas ecológicos o ambientales, pasando por el costumbrismo y el surrealismo, aunque también escribo poemas pasionales y trágicos, por eso mi primer libro publicado en 2002 se llama “Ensayo sobre el sueño” porque cuando tenemos una vida muy ocupada, y una agenda para cumplir; no paramos a observar detalles, pero guardamos como fotografías algunos momentos que después analizamos a solas, en ese silencio antes de dormir o al soñar.
RS: ¿Es cierto que te vales de algunos trucos como dejarte recados en el contestador, mandarte e-mails? ¿Cuando es necesario recurrir a esos trucos?
FUM: Bueno lo que pasa es que a veces tengo cosas por hacer en el laboratorio, en la casa o en los grupos comunitarios que participo siempre hay cosas que hacer, así que cuando me levanto en las mañanas, preparo un café y voy a mi ordenador, me mando un correo electrónico de lo que acaba de pasar y va directo a mi carpeta de literatura, porque de otra manera al medio día ya habré olvidado esas emociones que obtuve en un sueño o en la quietud de la mañana. Así, después cuando lo leo me hace revivir el sentimiento que me inspiró en la mañana, eso me da una estructura básica de lo que voy a escribir; aunque a mi no me gusta trabajar mucho la poesía, a menos que sea para un concurso o para la publicación en alguna revista ultra conservadora, que necesite pulir la métrica y demás detalles. Me gusta la poesía con pasión, quizá con algo de improvisación, evocando esas coplas antiguas o los corridos mexicanos, pero siempre con entrega y con fuerza, la que sea, pero que tenga fuerza. Prefiero leer un poema sin tanta métrica que me despierte pasión, ante un poema dirigido a cumplir requerimientos gramaticales; lo que es válido también. Me encanta leer un verso que deje algo en la imaginación. Me gusta mucho la poesía con pasión, aunque también hay poemas estéticos que mueven ese sentimiento.
RS: La impresión que hay de un científico es que siempre va en busca de la verdad, de la lógica. No hay verdad sino se demuestra. En ese aspecto --Francisco el biólogo y Francisco el poeta--; si te has entrenado para ser biólogo con la disciplina y rigor científico, ¿cómo complementas eso con tu parte artística?
FUM: Hay un dicho que se le atribuye a Borges que dice: “Odio la ciencia porque mata los sueños”. A mi no me gusta como científico que alguien me diga “esto pasó por un espíritu malo”, porque mi lado lógico me dirá que es un virus. Pero yo vengo de una familia muy espiritual, con esa mágica fusión de las utopías y las explicaciones folklóricas que son parte de una cultura, y que a fin de cuentas, le dan esa distinción a un grupo de personas. Respeto mucho las tradiciones, pero exploro y desarrollo mi pasión literaria en base de un respeto posible con lo que nos rodea.
RS: Puedes comentarnos un poco acerca de donde podríamos leer tu obra tanto científica como literaria y tus planes próximos.
FUM: Tengo la columna Tinta Verde que ya cumple diez años y que se publica en diferentes países, como también aquí en Ottawa en Eco Latino, y en mi blog: http://ucanmarin.blogspot.com/ donde se muestra la entrevista que Magdalena Ferreiro de CBC me hiciera acerca precisamente de Tinta Verde. Allí pongo énfasis en temas locales que nos preocupan en Canadá. De poesía tengo en diferentes revistas publicaciones en donde sigo desarrollando mi idea de lo que llamo “Eco Poemas”, que es transmitir de manera diferente lo que es la poesía fuera de ese tema poético de usar a dos personas de amor, pasión y demás cosas.
Alguien me señaló ultimamente que Pablo Neruda escribía con tinta verde. Esto yo no lo sabía. El nombre de mi columna apunta a lo del bosque, la naturaleza; lo de Neruda es una feliz coincidencia.
He publicado además un libro, como decía antes, titulado “Ensayo sobre el sueño” y otros en conjunto. También tengo escritos en revistas electrónicas como Genali (http://www.calkini.net/genali/52/52.htm), en el sitio de Etcheverry (http://www.etcheverry.info/), y diversas revistas escritas y electrónicas, en periódicos de México, España, Argentina y Canadá. En cuanto a ciencia he publicado algunos artículos científicos, dos tesis y un libro sobre pesticidas en vida silvestre, ahora estoy en pláticas con la Universidad de Florida para lo de la distribución.
Todos los artículos que han sido publicados en el Eco Latino me los pueden pedir personalmente a tintaverde@terra.com
RS: Tengo entendido que también estas planeando publicar un libro el próximo año con temas de Tinta Verde.
FUM: La idea es muy clara --y ya he empezado este libro--, es publicarlo con diez de los temas mas importantes de reciente interés, que se entienda que no es una recopilación de los artículos publicados, es mas bien un acercamiento a los temas actuales que preocupan a un ciudadano común, como el calentamiento global, el mal de las vacas locas, la gripa del pollo... (risas), etc. La gente no esta muy educada en este tema. Y las noticias buscan mas vender comerciales y por eso hacen un sensacionalismo y confunden, en lugar de informar y educar. Pero los noticieros de eso viven, de asustar a la población. El libro buscará presentar una explicación lógica y con sangre fría para que la gente tome sus propias conclusiones.
RS: Hay poemas tuyos que nos hablan de tu peculiar temática, como “Lluvia” o “La hamaca” podrías leernos por lo menos un fragmento de esta última.…
Mi hamaca azul esta vacía,/ le duele cada cuerda,/ cada espacio,/ cada triángulo tiene su historia,/ cada soga ha sido tatuada de sal, mar y recuerdos.
Mi hamaca azul cada vez,/ tiene más sueños locos...
... Con el paso de los años/ ha adquirido la forma perfecta,/ ha dormido con dragones y monstruos,/ con alegrías y tristezas.
He llorado en sus cuerdas,/ ahí he vertido mis fantasías,/ mi inocencia,/ mi juventud/
y mis sueños.
Mi hamaca azul está triste,/ le duele cada cuerda,/ ¡Oh Dios!, ¡Cuanto la he abandonado!...
...Mi hamaca azul está triste,/ le duelen sus mil huesos/ y el invierno …se acerca a mí/
ella sufre, tiene miedo.
RS: Tú dormías en una hamaca, entiendo.
FUM: Si, de hecho yo dormía en una hamaca hasta que emigré al Canadá. Mi familia en Campeche, México ha dormido desde siempre en hamacas. La primera cama que tuvimos fue cuando mi madre se enfermó. Pero hasta hoy en 2006 mi sobrina y mis hermanos duermen en hamacas. Es una cultura muy arraigada porque en el sureste mexicano dormir a 40 grados centígrados no es muy propio para estar en cama, ahora claro ya tenemos aire acondicionado pero aun así la gente duerme en hamacas porque es la tradición que persiste aun en una sociedad moderna. Después de tus padres, el objeto que quizá te ha abrazado cada día cuando duermes y despiertas es la hamaca, por eso la importancia del poema. Como lo dice, ahí pasas las primeras quebradas de piernas jugando al fútbol; o cuando juegas de niño creyendo que es un barco pirata, o cuando haces el amor por primera vez, o meces a tu primer hijo. Es un elemento cotidiano y a la vez tan íntimo y que fue lo primero que extrañé al llegar al Canadá…
A mi me gustaba mucho hacer caricaturas en la secundaria y me gustaba la idea de dibujar un mexicano no debajo de un nopal o cactus, yo imaginaba al mexicano estereotípico en su hamaca pateando una palmera para mecerse y con una laptop en la hamaca… me gusta ese estereotipo ahora en el siglo XXI.
RS: (Risas). Sí, sí.
FUM:... Entonces el poema es la estrecha relación de un individuo con un choque cultural, que es el elemento de raíz de su origen. Es algo muy arraigado en la población maya de México y Centroamérica.
RS: Cuéntame para terminar cómo tu familia influyó en lo que eres: una amalgama de ciencia y arte.
FUM: bueno mi padre me regalaba un libro para leer en cada aniversario, en tanto que mi madre me llevaba a pasear a los montes y a ver animales, recolectar pecesitos y demás cosas que ella disfrutaba también… el problema vino cuando empecé a ir a la primaria porque me escapaba e iba a la selva a recolectar serpientes y demás bichos… aunque ahora me pagan por hacer eso…
Mis poemas “Lluvia”, “Octubre” o “Las Sirenas”, abordan esas sensaciones, las de caminar sobre hojas secas, disfrutar la lluvia, las estrellas, la luna… esas cosas gratis tan gratas que se nos olvida disfrutarlas. En el costumbrismo de la poesía de “La Hamaca” abordo algunos aspectos culturales que son tan propios como incomprensibles para la gente que no los ha vivido.
RS: Muchas gracias, Francisco.
FUM: gracias a ti Ramón, hasta pronto.